¿Conoces los beneficios que puede aportar el mindfulness a tus niños?

El ser humano, a diferencia de los animales, es un ser racional. Esto le permite completar tareas inteligentes, desde hablar o razonar hasta controlar las emociones. Para ello, necesita controlar la zona cerebral más primitiva aplicando técnicas diversas, como son la meditación, el mindfulness o la respiración. El mindfulness para niños es una práctica que puede empezarse desde bien temprano y que les ayudará en el futuro.

Ejercicios de mindfulness en la infancia

La relajación resulta indispensable para mantener el control en las situaciones de estrés. También si padeces fobias o ansiedad.

El mindfulness se puede traducir como una atención consciente o plena. Pero, ¿qué ejercicios puedes hacer?

El juego es básico en la infancia, aunque no es sinónimo de gritos y saltos. Todo lo que quieras presentar a los más pequeños lo puedes dotar de un carácter lúdico. A continuación te presentamos algunos ejercicios sencillos que puedes hacer en casa con los niños. Toma nota:

1. Respirar. Se trata de un ejercicio muy básico que logra excelentes resultados. Cuando los pequeños son conscientes de su respiración se centran en el aquí y ahora. Para ello, deberán imaginar que su barriga es un globo que deben hinchar y deshinchar.

2. Imita a una serpiente. Se trata de hacerles imaginar a los niños que son una serpiente. Han de coger aire y expulsarlo imitando a una serpiente, pero en este caso concentrándose en el sonido.

3. Escuchar el silencio. Hay que permanecer en silencio y descubrir qué sonidos se escuchan en el ambiente.

4. Encender una vela y contemplar el vaivén de la llama y las fluctuaciones que suceden con el viento. Siempre con ayuda de un adulto.

5. Practicar un baño de bosque. Es una técnica japonesa que consiste en pasear por el bosque contemplando todos los matices. Por ejemplo, fijándote en las hojas, en las huellas, etc.

Como ves, el mindfulness te aportará paz en tu vida y en la de tus hijos.

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